Síndrome Visual Informático: ¿qué es y qué efectos tiene?

Las pantallas están por todas partes y un mal uso de estas puede causar Síndrome Visual Informático.

Síndrome Visual Informático

En la actual era digital, resulta impensable alejarnos de nuestros móviles y ordenadores, que parecen haberse convertido en una extensión más de nuestro cuerpo. Desde el trabajo hasta el entretenimiento, dependemos cada vez más de estos dispositivos con pantallas digitales para nuestras tareas diarias y cotidianas. ¿Alguna vez te has parado a pensar en el impacto que este uso, tal vez abusivo, puede tener sobre nuestra salud?

Una de las preocupaciones emergentes de los últimos años es el Síndrome Visual Informático, también llamado fatiga visual digital o astenopatía informática. Este engloba muchos síntomas oculares y fisiológicos que son consecuencias del uso de dispositivos digitales y la exposición a las pantallas.

El objetivo de este artículo de divulgación es explorar en profundidad qué es el Síndrome Visual Informático, sus causas, síntomas y efectos, así como proporcionar consejos prácticos para prevenir y aliviar sus molestias. Comprender este síndrome es fundamental en un mundo donde la tecnología desempeña un papel central en nuestra vida diaria. Al educarnos sobre sus riesgos y adoptar medidas preventivas, podemos salvaguardar nuestra salud visual y bienestar general mientras continuamos disfrutando de los beneficios de la era digital.

¿Qué es el Síndrome Visual Informático?

El Síndrome Visual Informático, también conocido como fatiga visual digital o astenopía informática, es un conjunto de síntomas oculares y físicos que resultan del uso prolongado de dispositivos digitales como computadoras, tabletas, smartphones y otros dispositivos con pantallas electrónicas. Este síndrome se ha vuelto cada vez más común en la era digital actual, donde el uso de dispositivos electrónicos es omnipresente en la vida cotidiana, tanto en el trabajo como en el tiempo libre.

Los principales factores que contribuyen al Síndrome Visual Informático son la exposición prolongada a la luz azul emitida por las pantallas digitales, la fatiga ocular debido al enfoque constante en objetos cercanos, la falta de parpadeo regular al mirar pantallas y la tensión muscular asociada con la postura sedentaria durante el uso de dispositivos digitales.

La luz azul emitida por las pantallas digitales, en particular, ha sido objeto de investigación debido a su capacidad para penetrar profundamente en el ojo y perturbar los ritmos circadianos, lo que puede afectar la calidad del sueño y provocar trastornos del sueño. Además, la fatiga ocular causada por el esfuerzo continuo de enfocar objetos cercanos sin descanso puede provocar visión borrosa, sequedad ocular, picazón, ardor y dolor de cabeza.

Es importante tener en cuenta que el Síndrome Visual Informático no afecta únicamente a los adultos que trabajan largas horas frente a una pantalla del ordenador, sino también a los niños y adolescentes que utilizan dispositivos electrónicos para actividades educativas, recreativas y sociales. De hecho, los estudios sugieren que los niños pueden ser aún más susceptibles a los efectos negativos de la exposición prolongada a las pantallas digitales debido a su sistema visual en desarrollo y su menor tendencia a parpadear regularmente mientras usan dispositivos electrónicos.

Las causas principales

El Síndrome Visual Informático tiene diversas causas que contribuyen a su desarrollo y manifestación en aquellos que hacen un uso extensivo de dispositivos digitales. Estas causas están estrechamente relacionadas con el entorno digital en el que vivimos y las formas en que interactuamos con la tecnología. A continuación, se detallan algunas de las principales causas:

1. Luz azul de las pantallas

Una de las principales causas del Síndrome Visual Informático es la exposición a la luz azul emitida por las pantallas de dispositivos digitales. La luz azul tiene una longitud de onda corta y alta energía, lo que le permite penetrar más profundamente en el ojo y afectar las células fotosensibles de la retina. Esta exposición prolongada puede alterar los ritmos circadianos, suprimir la producción de melatonina y causar fatiga visual y trastornos del sueño.

2. Fatiga ocular

El acto de enfocar constantemente objetos cercanos, como ocurre al leer texto en una pantalla digital, puede provocar fatiga ocular. Cuando los músculos ciliares dentro del ojo se esfuerzan repetidamente para enfocar, pueden volverse fatigados y tensos, lo que resulta en síntomas como visión borrosa, sequedad ocular, picazón y ardor.

3. Falta de parpadeo

Al mirar pantallas digitales, las personas tienden a parpadear con menos frecuencia de lo normal. Esto puede deberse a la concentración en la pantalla y al esfuerzo por mantener la atención en el contenido. La reducción del parpadeo puede provocar sequedad ocular y aumentar la incomodidad durante el uso prolongado de dispositivos digitales.

4. Postura inadecuada

La postura sedentaria durante el uso de dispositivos digitales también puede contribuir al Síndrome Visual Informático. Una mala posición del cuerpo, como encorvarse sobre un dispositivo o mantener una posición incómoda durante largos períodos, puede provocar tensión muscular en el cuello, los hombros y la espalda, exacerbando los síntomas asociados con la fatiga visual.

Síntomas y efectos

El Síndrome Visual Informático presenta una variedad de síntomas que pueden afectar la comodidad y la salud visual de quienes pasan largas horas frente a dispositivos digitales. Estos síntomas pueden manifestarse de manera individual o en combinación, y su intensidad puede variar según la duración y la frecuencia del uso de pantallas. A continuación, se describen algunos de los síntomas más comunes del Síndrome Visual Informático:

1. Fatiga visual

La fatiga visual es uno de los síntomas más predominantes del Síndrome Visual Informático. Se manifiesta como una sensación de cansancio o pesadez en los ojos, acompañada a menudo de visión borrosa, dificultad para enfocar y sensibilidad a la luz.

2. Sequedad ocular

La exposición prolongada a las pantallas digitales puede reducir la frecuencia del parpadeo, lo que resulta en una disminución de la lubricación ocular y una sensación de sequedad, irritación y picazón en los ojos.

3. Dolor de cabeza

El esfuerzo visual constante y la tensión muscular asociada con el estilo de vida sedentario pueden provocar dolores de cabeza tensionales, que se manifiestan como una sensación de presión o dolor en la frente, las sienes o la parte posterior del cuello.

4. Visión borrosa

La visión borrosa es otro síntoma común del Síndrome Visual Informático y puede manifestarse como dificultad para enfocar objetos cercanos o lejanos. Este síntoma puede empeorar con el tiempo y afectar la calidad de la visión en general.

5. Trastornos del sueño

La exposición a la luz azul de las pantallas digitales puede interferir con los ritmos circadianos naturales del cuerpo, lo que puede provocar dificultades para conciliar el sueño, mantener un sueño reparador y despertarse sintiéndose descansado.

6. Dificultad de concentración

El malestar físico asociado con el Síndrome Visual Informático, como la fatiga visual y los dolores de cabeza, puede afectar la capacidad de concentración y el rendimiento cognitivo durante las actividades que requieren atención sostenida.

Prevención y consejos para aliviar el Síndrome Visual Informático

Afortunadamente, existen medidas preventivas y consejos prácticos que pueden ayudar a aliviar y prevenir los síntomas del Síndrome Visual Informático. Adoptar hábitos saludables y hacer ajustes en el entorno digital pueden marcar una gran diferencia en la comodidad y la salud visual a largo plazo. Aquí hay algunas recomendaciones útiles:

1. Descansos regulares

Realiza pausas cortas y frecuentes durante el uso de dispositivos digitales. La regla 20-20-20 es especialmente útil: cada 20 minutos, mira un objeto que esté a una distancia de más o menos 6 metros durante al menos 20 segundos para descansar los ojos.

2. Ajusta la iluminación

Reduce el brillo de la pantalla y ajusta la configuración de contraste para que sea cómoda para tus ojos. Además, asegúrate de que la iluminación ambiental en la habitación no sea demasiado intensa ni demasiado tenue, ya que esto puede causar fatiga visual.

3. Utiliza filtros de luz azul

Considera la posibilidad de utilizar filtros de luz azul en tus dispositivos digitales o aplicaciones que reduzcan la cantidad de luz azul emitida por las pantallas. Estos filtros pueden ayudar a mitigar los efectos negativos de la exposición a la luz azul y mejorar la calidad del sueño.

4. Mantén una postura adecuada

Asegúrate de mantener una postura erguida y cómoda mientras usas dispositivos digitales. Utiliza sillas y mesas ergonómicas que te permitan mantener una buena alineación del cuerpo y evita encorvarte sobre la pantalla.

5. Parpadea con regularidad

El parpadeo es necesario para la lubricación del ojo, que suele resecarse por la exposición a las pantallas y luz azul. Conscientemente, intenta parpadear con más frecuencia mientras usas dispositivos digitales para mantener los ojos bien lubricados y prevenir la sequedad ocular.

6. Realiza ejercicios oculares

Practica ejercicios simples para relajar los músculos oculares y mejorar la flexibilidad visual. Por ejemplo, realiza movimientos de mirar de lado a lado, arriba y abajo, y enfocar objetos cercanos y lejanos.

Conclusiones

En conclusión, el Síndrome Visual Informático es una preocupación creciente en la era digital. Sus causas incluyen la exposición a la luz azul, la fatiga ocular y la postura inadecuada. Los síntomas abarcan desde la fatiga visual hasta trastornos del sueño. Sin embargo, la prevención es posible con descansos regulares, ajustes de iluminación, filtros de luz azul y una postura adecuada. Estos cambios pueden aliviar los síntomas y mejorar la salud visual a largo plazo. Es esencial concienciar sobre este síndrome y adoptar hábitos saludables para mantener el bienestar en un mundo digitalmente conectado.

  • Leyé, I. F., Castellano, Y. B., Laffita, A. E. G., & Ramírez, M. A. (2012). Síndrome visual informático. Revista Información Científica, 74(2).

Psicólogo

Javi Soriano es graduado en Psicología por la Universidad de Valencia y está acabando un Máster en Investigación Psicosocial. Le interesa todo lo que tiene que ver con las personas y la sociedad, pero le encanta leer y escribir sobre temas relacionados con el género, la sexualidad y las minorías. Es una persona muy curiosa a la que le encantan los debates y aprender de los demás.

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